AVANZANDO

Ya basta. Ha estado mucho tiempo negándose a ella misma. A sus sentimientos, a lo que quería. Volando sin rumbo, sin sentido y sin emoción. 

Echa la vista atrás y no ve más que incongruencias. Es hora de valerse por ella misma. De no depender de nadie. Es hora de esta tranquila con la mejor compañía que es ella misma. 

Mira atrás y solo ve lluvia y llanto, y alguna sonrisa esporádica entre la neblina de la melancolía. 

No se merece vivir así. Llega un momento en el que hay que saber soltar y decir adiós. 

Y, sobre todo, no volver a mirar atrás.